Komatsu- Iommi- Testa en Galería Del Infinito
“Hiato”, título de la muestra que se exhibe en galería Del Infinito y organizada junto a la paulista Vermelho reúne obras de tres artistas, Enio Iommi (Rosario, 1926- El Palomar, 2013), Clorindo Testa (Italia, 1923-Buenos Aires, 2013) y André Komatsu (San Pablo,1978).
Los reúne la provocación social y la crítica sin concesiones de Iommi, la arquitectura revolucionaria de Testa, la deconstrucción de la sociedad y el poder en Komatsu, los tres en permanente desafío a las convenciones.
Los une también el uso de materiales austeros, la gama de blancos , grises, elementos como el hierro, acrílico, clavos de acero, obra ascética, despojada de toda narrativa.
Iommi se destacó por su rebeldía, su inconformismo, era transgresor, conflictivo. Este gran escultor argentino, cofundador en 1946 de Arte Concreto- Invención establecerá una ruptura con los cánones académicos. En una ocasión señaló: “debemos sacudirnos para sacarnos el conformismo que invade el ambiente artístico” . Artista exitoso, vendía una obra por semana, aquellas geométricas, espiraladas, en bronce, cobre y acero inoxidable muy pulidas, un dibujo en el aire, “refinadísimas” como las definió el crítico Aldo Pellegrini.
Fue esta palabra que actuó como señal de alarma y entonces abandona la búsqueda de lo bello para presentar un conjunto de envases de cartón , llenando las paredes de la mítica galería Carmen Waugh con inscripciones ligadas al mundo del arte y del consumo.
En 1977 presentó “Adiós a una época”1948-1977 al 2000. Junto a sus obras refinadas, la famosa “Un rectángulo de acrílico y basura” que marcó una época en la que empieza a trabajar con materiales de desecho y con un texto: “Año 2000, creo que será como siempre, la fachada humana muy brillante pero por dentro seguiremos acumulando escombros”.
Panes rellenos de adoquines, con los que alertó acerca de las desigualdades, pavas, cafeteras, cacerolas, baldes de aluminio, seccionados, elevados a la categoría de esculturas mostrando su interior para que el espacio funcione como forma. En 2001 comienza una etapa de objetos ensamblados, intervenidos con juguetes de plástico en los que satiriza el poder, dignifica los materiales pobres, a través de los que expresa su eterno inconformismo y su pensamiento crítico.
Sería ocioso reveer la biografía del famoso arquitecto Clorindo Testa que ha dejado importantísimas obras edilicias y que desarrolló su actividad pictórica paralelamente. Formó parte del Grupo de los Cinco: Fernández Muro, Kasuya Sakai, Sara Grilo, Miguel Ocampo. Recibió grandes premios, se inclinó por el arte conceptual, fue miembro de la Academia de Bellas Artes, ganó el premio Itamaraty por “La peste en la ciudad” su envío a la Bienal de San Pablo de 1977.
Sus obras como arquitecto fueron hechas para resistir el tiempo, en cambio, en su estética precaria en las artes visuales incorporó cartones, telas, chapadur, cerámica, barro, madera de cajones , recordamos “Apuntalamiento para un Museo de Bellas Artes” en la que se refería críticamente a la decadencia cultural con maderas clavadas.
Andrés Komatsu, miembro influyente de la generación que presenció la transición democrática en Brasil y la adopción del neoliberalismo en los 90 invita con su obra, a cuestionar las formas en que interactuamos con el mundo.
Utiliza fragmentos de mampostería y los materiales reciclados se convierten en símbolos de cambio y resistencia. Para su muestra en 2013 en la galería Vermelho, el curador, Jacopo Crivelli Visconti escribió que “el discurso sobre el poder y los conflictos sociales impregnan los materiales elegidos por el artista y los títulos explicitan su visión del mundo, muy influído por Michel Foucalt”.
Del Infinito, Presidente Quintana 325. PB
Publicado en Ambito Financiero (4/9/23)
